Berkshire de Buffett reduce Apple a una ponderación del 21% y construye una nueva participación en Alphabet, reasignando su exposición tecnológica hacia IA, nube y anuncios digitales.
Berkshire Hathaway Inc. de Warren Buffett redujo sus participaciones en Apple Inc. y compró acciones de Alphabet Inc. durante el tercer trimestre, según presentaciones regulatorias.
Berkshire vendió 41,7 millones de acciones de Apple durante el período, reduciendo la ponderación de la cartera de la compañía en el gigante tecnológico al 21 por ciento, lo que representa una reducción del 74 por ciento en dos años, mostraron las presentaciones.
Apple reportó $102.000 millones en ingresos para el trimestre de septiembre, un aumento del 8 por ciento respecto al año anterior, respaldado por las ventas de iPhones, computadoras Mac y servicios, según el estado de resultados de la compañía. El ingreso neto no-GAAP aumentó un 13 por ciento a $1,85 por acción, impulsado por el crecimiento de márgenes y programas de recompra de acciones.
La base instalada del fabricante de iPhone supera los 2.350 millones de dispositivos, según datos de la compañía. Apple introdujo su suite Apple Intelligence el año pasado, que actualmente ofrece funciones de inteligencia artificial generativa para dispositivos más nuevos sin cargo. La compañía ha indicado que se esperan opciones de pago en los próximos años.
Berkshire adquirió 17,8 millones de acciones de Alphabet durante el trimestre, representando aproximadamente el 2 por ciento de la cartera de la firma de inversión, indicaron las presentaciones. Alphabet ha generado un retorno del 12.180 por ciento desde su oferta pública inicial de 2004 y tiene una capitalización de mercado de $3,7 billones, convirtiéndola en la tercera compañía más grande a nivel mundial por valor de mercado.
La inversión marca un cambio para Buffett, quien históricamente evitó las acciones tecnológicas. El negocio de Alphabet abarca publicidad digital, computación en la nube y tecnologías de conducción autónoma.
Las transacciones reflejan la reasignación de Berkshire dentro del sector tecnológico, reduciendo la exposición a Apple mientras añade posiciones en compañías con capacidades de inteligencia artificial, según las divulgaciones regulatorias.


